Un año más, y van once, llega fiel a su cita en el día de
Reyes El Observador de Estrellas Dobles. Y una vez más lo hace con un número
cargado de excelentes artículos, noticias y novedades relacionadas con el mundo
de las estrellas dobles.
A las firmas habituales (como son nuestros queridos
compañeros Carlos Krawczenko, Lluís Ribé, Francisco Rica, Manuel del Valle,
Ramón Sobrino o Joseph M. Carro), se suman otras nuevas, como es el caso de
José Antonio Gutiérrez, cosa que siempre nos agrada sobremanera. En sus
trabajos podréis ver los resultados de sus observaciones e investigaciones.
Además, nos alegra contar con dos colaboradores de lujo. Por
un lado, tenemos a Andrea Mantero en la sección ¿Por qué observo estrellas
dobles? Le agradecemos la deferencia de contarnos el cómo y el porqué de su
afición por estos astros. Sabemos que es una de vuestras secciones favoritas y
es que siempre es inspirador conocer el lado más cercano, y hasta íntimo, de
los observadores de estrellas dobles.
Además, cerrando la revista como siempre hace la sección
Fuera de foco, contamos con Montse Campàs, una astrónoma aficionada que no
necesita muchas presentaciones dada su dilatada dedicación astronómica que es
bien conocida por todos. Su colaboración titulada “Cómo ser astrónoma y no
morir en el intento” seguro que os agrada y sorprende a la vez.
Como es habitual, también podréis encontrar las habituales
páginas de actualidad de la mano de Francisco Rica (sección de Noticias) y de
Edgar Masa que nos mantiene al tanto de las últimas novedades de la Comisión de
Estrellas Dobles de la Unión Astronómica Internacional. Pero es que, además,
presentamos un comunicado oficial del Observatorio Naval de Estados Unidos
(USNO) en relación a la publicación de nuevos pares por astrónomos aficionados
a partir de la minería de datos. Y son malas noticias. De momento no se van a
admitir nuevos pares descubiertos por aficionados que hayan usado datos
extraídos de los grandes surveys actuales, especialmente de Gaia. Sabemos de
muchos aficionados que tenían en preparación centenares de nuevos pares con
movimiento propio común y que, de esta manera, han visto cómo sus esfuerzos
caen en saco roto. Entendemos, por otro lado, la necesidad de poner orden
en la veda que se abrió tras la
publicación de la DR2 de Gaia y que la prioridad de estos descubrimientos debe
ser, en primera instancia, atribuidos a los astrónomos involucrados en el
desarrollo de estas misiones espaciales. No obstante, creemos necesario que el
USNO agilice las labores de mantenimiento y puesta al día del catálogo de
referencia, el WDS, para que siga siendo
la referencia que siempre fue en el mundo de las estrellas dobles. A pesar de
ello, sigue existiendo un trabajo al que los astrónomos aficionados podemos
dedicarnos con plena dedicación: la observación de estrellas dobles, la
publicación de datos actualizados y la confirmación de parejas olvidadas (o no
observadas) desde hace décadas.
No queremos terminar sin desearos a todos un muy feliz año
2020. Un año nuevo que, esperemos, venga cargado de noches despejadas que nos
permitan observar mucho. Y si alguna de esas observaciones va dedicada a las
estrellas dobles, ya sabéis donde tenéis un lugar para publicar vuestras
medidas. Que así sea. ¡Feliz 2020!
Los editores
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Nuestro agradecimiento a Víctor R. Ruiz por alojar OED en el servidor de Infoastro.