A veces hay personas que dejan una huella imborrable, aunque ya no estén con nosotros seguimos sintiendo su presencia como si estuvieran aquí mismo.
Y ese es el caso de la imagen de hoy centrada en una parte del mar de las lluvias. Aunque no lo veamos, el gran protagonista es el cráter Copérnico. Inundando toda la imagen vemos su sistema de rayos que se extienden hasta los 800 km de distancia creando una red impresionante. Además, en la parte inferior vemos cadenas de cráteres secundarios muy pequeños, formando líneas rectas, que no es otra cosa que el material eyectado tras el impacto que formó el cráter. Aunque no lo veamos, el protagonista es Copérnico y nos está contando parte de su historia. Solo hay que saber ver y escuchar y abrir nuestros sentidos para entenderlo.
La cordillera que vemos en toda su longitud son los Cárpatos con 360 km de longitud y cumbres que alcanzan los 2400 metros de altura. Vemos como la eyecta de Copérnico, mucho más reciente, se superpone sobre ella. A la izquierda, especialmente en la parte inferior, vemos varios campos de domos, esas pequeñas colinas de muy baja altura de las que hemos hablado en otras ocasiones. En muchas de ellas podemos ver la caldera en su cumbre que nos indica su carácter volcánico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario